El caso es que en algún momento tenemos la necesidad de abrirla, para saber si el contenido sigue igual o ha cambiado.
Hay cajas distintas…las que llevan mucho tiempo cerradas y las que acabas de cerrar.
Las que llevan mucho tiempo cerradas, te da por abrirlas por melancolía, por intentar recordar lo que había dentro, rememorar esas cosas que pasaron , pensando en que cualquier tiempo pasado fue mejor. En algunos momentos necesitas pensar que te gustaría que todo fuera como antes de cerrar esa caja. Pero al abrirla te das cuenta de que si estaba cerrada era por algo…
Con las cajas que se acaban de cerrar ocurre algo parecido, con la salvedad de que esta vez piensas que si no la dejas cerrada podrás cambiar algo…
Quieres abrirla cuanto antes por si pudieras cambiar los hechos, o simplemente ver que todo ha cambiado y que no hay necesidad de cerrarla.
Simplemente volvemos abrir la caja, para no tener que cerrarla, imaginando que lo que hizo que se cerrara se ha solucionado mágicamente y todo vuelve a la normalidad.
Pero también descubres que no es así…Cuando llegue el momento de abrir la caja lo sabras…mientras tanto guarda la llave, nunca sabes cuando la vas a necesitar….
Kibou.
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